Sin embargo, también tuve la oportunidad de conocer personalmente el mero mero de los tomatitos que habitan en el hábitat de la Pieri. El objeto inanimado, probablemente de fabricación japonesa que simula un fruto de la planta de la familia de las solanáceas, una planta herbácea, fragante, con tallos rastreros, hojas partidas, flores amarillas con corola enrodada, y frutos en baya generalmente rojos, y que es originaria de México y que se cultiva por su valor hortícola, era rojo pero no jugoso. Esto se debía a que este espécimen es algo que nosotros conocemos semántica morfológica y sintácticamente por el nombre de "peluche", el cual lucía un aspecto agradable hacia la vista humana.
A continuación, yo les brindo un ejemplo muy ilustrativo y didáctico de lo que estoy hablando:
Aqui tenemos a Carlos Caraccioli dándole su respectivo tomatito a la Pieri.